sábado, 29 de junio de 2019

PARA VERDADES EL TIEMPO. 29/6/2019

NOTAS AL TEMA

PARA VERDADES EL TIEMPO

Guillermo E. Zúñiga Chaves

Si algo nos está enseñando la actual situación económica es que la ortodoxia criolla anda mal ubicada. Sin explicitarlo abiertamente han venido aplicando su programa de estabilización: prioridad en el control  de la inflación, restricción del gasto público; reducción de la demanda agregada, manejo restrictivo de los agregados monetarios, incluido el crédito.  Resultado: un ajuste recesivo

Por años, desde las tiendas conservadoras, se han encargado de señalar como culpable de todos lo males a la intervención estatal y  han tratado de impulsar este tipo de ajustes: menos Estado; más Mercado. Hasta que se encontraron con un gobierno que les entregó el manejo de la política económica. ¡Quién se iba a imaginar que sería con un presidente electo por el PAC!

OBJETIVOS DEL BCCR. Respaldo que la política monetaria sea responsable en el manejo de la inflación. Pero he insistido en que un objetivo primario del Banco, del mismo rango que la estabilidad de precios, debe ser generar empleo. Han torpedeado esta idea de todas formas. ¡Qué no han dicho! La principal acusación a quienes pedimos esta función para el BCCR es que queremos provocar la inflación. ¡Falso!  

MÁS VALE TARDE...Pero la realidad es tan majadera, que hoy el que se ha echado a la espalda el tibio esfuerzo para reactivar la economía es el Banco Central. Tuvieron que guardar los manuales y sus dogmas. Por fin aceptan que el Banco haga una política más pragmática  y reconocen que el Banco tiene una arsenal de instrumentos que pueden ayudar contra el desempleo.  ¿Por qué no darle este mandato al Central de manera permanente? Es un buen momento para retomar la modificación de la ley del BCCR. La realidad se impuso a sus dogmas. 

DEMANDA INTERNA. Propio de estas tesis, es sostener que los manejos monetarios son suficientes para promover el crecimiento. ¡Otro error! Se olvidan que hay que impulsar la demanda interna, posición que ha probado su utilidad desde siempre. Si no hay demanda por los productos, los empresarios no van a invertir, pues no tienen quien les compre.  Y la demanda interna se activa dando capacidad de compra a los consumidores locales, vía salarios y actividad pública. Han contraído tanto la demanda interna, que la economía nacional “no se anima”. Apostar solo al mercado exterior es otro error. 

LA REGLA FISCAL. Presentaron esta iniciativa como el remedio contra todos los males. Es más, era la pieza clave para generar la confianza tan necesaria. ¡Ni una cosa ni otra! La aplicación de la regla fiscal ya está haciendo estragos económicos en la demanda interna, y pronto, hará estragos sociales. Por ejemplo, cuando le apliquen la regla a la Caja Costarricense del Seguro Social y se restrinjan sus servicios.  Es cuestión de tiempo. Y esto va a agriar más la situación social. Y mientras sigan estrujando a la gente, seguirán imponiendo la estabilización recesiva, y la reactivación estará cada vez más lejos.

Los  mismos diputados que votaron a favor de la regla fiscal, ya están impulsando un proyecto para sacar a las municipalidades de esta regulación. Y harían muy bien en incorporar de inmediato una excepción parecida para los servicios médicos de la Caja, y para las demás instituciones que generan recursos propios. Cuanto antes mejor. 

En el año 2009, cuando experimentamos los efectos más severos de la Gran Recesión (de origen externo), la demanda interna jugó un papel amortiguador ante esos embates. E incluso, como lo he dicho en otras ocasiones, el sector privado dio incrementos salariales por encima de lo que le obligaba la ley. Y aplicamos un plan integral para enfrentar la crisis. ¿Y saben qué? En ese momento las voces conservadoras nos pedían  que no mejoráramos los salarios, lo cual hubiera contraído aún más la demanda interna. Como no les hicimos caso, han inventado las mentiras más atrevidas sobre este esfuerzo nacional.  

CONCLUYO. Queda muy mal parada la ortodoxia económica criolla. La historia les está demostrando que sus recetas no funcionan para el bien común. Y están induciendo al país a una tensión social inconveniente.  El Gobierno debe corregir su rumbo. Revisar la historia puede serles útil. 



sábado, 15 de junio de 2019

TIEMPOS DIFÍCILES. 15/6/2019

NOTAS AL TEMA

TIEMPOS DIFÍCILES

Guillermo E. Zúñiga Chaves

El último informe publicado por el Banco Central para medir el comportamiento de la actividad económica al mes de abril, muestra una tendencia negativa. Si se comparan los datos de abril de 2019 respecto a abril del 2018 tenemos que el sector agropecuario cayó -3,9%; el sector de la construcción cayó -2% y el sector comercio, que de por sí venía muy lento, cayó -0,3%. 

En el sector agropecuario destacan caídas muy grandes en la producción de banano (-27,1%) y en la producción de piña (-10,5%).  Por su parte el sector manufacturero creció en 2,3% debido principalmente a que las empresas de zonas francas aumentaron su producción en  10,8%, lo que vino a compensar  la disminución de -2,5% del régimen definitivo. 

UN MERCADO INTERNO DEPRIMIDO, AFECTA LA PRODUCCIÓN. Si el sector comercio, la construcción y la manufactura,  dirigida al mercado local, tienen números negativos, es claro que estamos en presencia de una contracción de la demanda interna. Se muestra de esta forma, que los dos motores (mercado externo y mercado local) deben jalar juntos al mismo tiempo. De otra forma, “el avión se puede desbalancear”. El mercado interno no debe desatenderse, y esto pasa por la generación de empleo, la política salarial y la política de gasto público.

FACTORES QUE EXPLICAN. El mismo Banco Central explica que estos comportamientos se deben tanto a factores externos como internos. Si los países que nos compran tienen problemas económicos o políticos, o si los precios de los productos de exportación caen, o si aumenta el precio del petróleo, factores señalados por el Banco, es muy poco lo que podemos hacer; su manejo no está en nuestras manos.  Y respecto a los  choques climáticos, que también son señalados como parte de las afectaciones  sobre todo en el sector agropecuario, hay que decir que el  margen de acción inmediato es mínimo. 

Pero el Banco señala también como factor explicativo del mal desempeño productivo  a “los bajos niveles de confianza de los consumidores y empresarios”Y remite a los últimos resultados del Índice de Confianza del Consumidor, publicado por la Universidad de Costa Rica y al Índice de Confianza Empresarial de la UCCAEP. (BCCR, Evolución del Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE), abril 2019, 11 de junio 2019). Este tema de la poca confianza sí es un asunto de manejo interno que señala la urgencia de recomponer las alianzas sociales que permitan recuperarla. 

EL ENCAJE LEGAL. El Banco Central bajó el encaje legal, lo cual en teoría permitirá mayores flujos de efectivo en la economía para promover la reactivación. Sin embargo, esta es una medida que tomará tiempo para mostrar resultados, pues los mecanismos de transmisión son lentos. Resultados inmediatos por esta acción no se pueden esperar. 

LA REFORMA FISCAL. En medio de este clima de desaceleración productiva y  desconfianza de los agentes económicos, en pocos días entrará a regir una serie de medidas que están contempladas en el Plan Fiscal. Otras ya han sido puestas en ejecución, como la aplicación de la regla fiscal, que sin la menor duda está reduciendo el dinamismo del mercado interno. Y el nuevo IVA también va a afectar la capacidad de compra de los consumidores, aunque un estudio reciente de la UNA minimiza el impacto en las familias. Si se estruja la economía se estruja el bolsillo de los costarricenses y cae la demanda.

Los efectos de estas medidas fiscales se conocían desde el principio; quiero decir desde que se discutían. Por tanto se esperaba que las autoridades económicas tomaran las previsiones del caso para manejar la situación. Sin embargo, han tenido serias dificultades para manejar el corto plazo. 

CONCLUYO. Factores externos, desconfianza, IVA en camino, falta de planes alternativos para manejar el corto plazo, caída en la demanda, dibujan el clima que tenemos por delante. Esta situación exige un manejo político cuidadoso y activo, que permita recuperar la confianza y así aminorar la crispación que se siente en el ambiente nacional. No me cansaré de señalar que es urgente identificar los temas  que nos unen. Y convocar, cuanto antes, al Consejo Económico Social, que ofreció el Presidente. 



sábado, 1 de junio de 2019

DIME CON QUIÉN ANDAS… 1/6/2019

NOTAS AL TEMA

DIME CON QUIÉN ANDAS…

Guillermo E. Zúñiga Chaves

Aumentó la desconfianza en el manejo de los asuntos públicos. Esto no ayuda a mejorar el clima de los negocios. Lo que sucede es que la gente no percibe mejoras, a pesar de todos los anuncios y cadenas de televisión oficiales llenos de optimismo. Al pueblo se le están pidiendo grandes sacrificios y no está claro qué se recibirá a cambio. La política requiere de ilusiones, pero es ante todo un mundo de realidades.  Y la realidad es cada vez más dolorosa para los más desposeídos. 

CIERTO QUE HAY UN BLOQUE DE FUERZAS GOBERNANTES(que incluye partidos políticos, Asamblea Legislativa, al Ejecutivo, partes del sector empresarial) que han estado detrás de muchas de las iniciativas impulsadas por este Gobierno. En el segundo semestre del año pasado, construyeron un clima favorable para la aprobación de la reforma fiscal, al tiempo que montaron un instante de ilusión y, diría, hasta de optimismo en la población. Se vendió la idea que con la aprobación de ese proyecto la situación acongojante, que también se habían encargado de dibujar, iba ser superada. 

Al iniciarse el año 2019 empezaron aparecer los “peros”; se nos comunicó que aquello, de por sí amargo,  había sido simplemente un primer paso; que se iba a requerir endeudamiento adicional, que en la de menos habría que pasar nuevos impuestos, porque lo aprobado no alcanzaba. Y la reactivación económica no apareció, y por el contrario los indicadores conocidos señalan que vamos peor que el año pasado.No se espera que haya reactivación en el corto plazo, con lo cual los problemas de desempleo, subempleo y de pobreza aumentan y golpean a los sectores más pobres. 

ESTABILIZACIÓN. Nos han tratado explicar que primero hay que estabilizar fiscal y financieramente al país; nos han tratado de vender la idea que con inflaciones bajas vamos a salir adelante, que con políticas monetarias cautas se descentraba al país,  pero nada eso se transforma en resultados que sean apreciables por la población. La gente se siente engañada. No come cuento, ni macroeconomía ni estabilidad. Es hora que los diseñadores de la política nacional lo entiendan de una vez por todas: o se atienden los problemas apremiantes de la población, o los resultados serán un fracaso

REACTIVACIÓN. El gran Talón de Aquiles del momento es la reactivación económica pero el Gobierno no ha tenido la capacidad para articular un único plan creíble,  con metas cuantificables, con acciones armonizadas entre los distintas ejecutores de política pública, acompañado de la ingeniería financiera para su implementación, en fin un plan único, articulado, viable, financiado, que enrumbe al país hacia la mejora productiva.Por el contrario, todos los días surgen nuevas propuestas, que al no articularse, no dan la confianza suficiente para que la inversión y los consumidores se sientan cómodos. El manejo ha sido errático, desarticulado, al punto que una buena iniciativa del calado del Plan de Descarbonización, que es una opción a considerar, ha creado enemigos en todos los frentes.

DEUDA. El gobierno anuncia con bombos y platillos el endeudamiento con la CAF por US$ 500 millones, que vendrían acompañados de los US$ 350 millones del BID. Y ahora la Asamblea Legislativa les aprobó US$ 1.500 millones en Eurobonos. Pero esto no es más que financiar con deuda externa los huecos fiscales que tenemos, puesto que  las cifras siguen siendo malas, y el déficit a abril de este año es más alto  que el de abril del año pasado. Esto es lo que se ve: malos resultados fiscales, más endeudamiento, más hipoteca nacional hacia futuro

CONCLUYO.El Gobierno debe dejar su autocomplacencia.  El Gobierno debe entender que es urgente recuperar la confianza de los ciudadanos, de otra manera todo ese endeudamiento que se está gestionando no va a ser productivo. No debe nublarse por los aplausos que le llegan de los grupos más conservadores del país, que todos los días le atizan la confrontación con  los sectores sociales. ¡Mucho cuidado! ¿Hacia dónde vamos?