NOTAS AL TEMA
Despacio, que tenemos prisa.
Guillermo
E. Zúñiga Chaves
Pasado mañana, es decir el lunes 30 de abril, los actuales diputados
de la Asamblea Legislativa terminan sus funciones. El 1 de mayo toman posesión
los nuevos legisladores. La Asamblea tendrá una nueva composición: varía el
tamaño de las bancadas, nuevos partidos
tienen representación, otros la perdieron. Pero, sobretodo, llegan nuevas
personas, nuevas formas de ver las cosas, nuevos estilos de hacer política y
por qué no decirlo, nuevos intereses.
EL 208-BIS. Me refiero al Proyecto Ley
de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas Este tiene un procedimiento especial,
abreviado, de vía rápida. Los plazos no le alcanzaron a los actuales diputados;
el proyecto se quedó a medio camino en su trámite. Es más, el jueves pasado se rompió el quorum de la Comisión Especial y se paralizó la revisión de
mociones. Pero la vida de los proyectos
sigue en las comisiones y la nueva Asamblea tendrá que entrar a verlos,
incluido este 208-bis. Los nuevos diputados se encontrarán el proyecto caminado,
y serán ellos quienes decidan su aprobación o rechazo.
PUNTOS DE VISTA. En el ambiente político se pueden señalar dos posiciones. Por un lado, está un grupo que insiste en
la necesidad de aprobar este proyecto, con los cambios que se le han ido haciendo. Se
argumenta que sería una señal de que podemos llegar a acuerdos políticos, sobre
todo para los actores internacionales, que nos han hecho ese reclamo. Esto a sabiendas que este proyecto “no alcanza”
y que se requerirán acciones legislativas adicionales, a muy corto plazo, con
el desgaste de negociación que esto conlleva.
Por el otro lado, un grupo
de los nuevos diputados, reconociendo la
importancia del tema y el grado de avance logrado, dice que quiere un poco de tiempo para revisar lo que reciben. En
particular ha sido claro el jefe de la nueva fracción del PLN, aunque se sabe
que otras fracciones pueden ir en la misma línea. Me parece razonable que los
nuevos diputados se tomen esas previsiones, pues al fin y al cabo serán los
responsables políticos de lo que ahí salga. Solo que no se deben tomar mucho
tiempo. No creo que revisar sea obstruir.
Adicionalmente esta semana apareció un nuevo componente, al que hay que ponerle
cuidado. Este proyecto y la realidad política del país, logró lo que hacía años
no veíamos. Los sindicatos del Sector
Público marcharon unidos. Es más, lograron convocar a representantes de
otros sectores.
Me llamó la atención que el actual Gobierno no los atendiera. Y no
se conoce de contactos entre representantes del futuro gobierno y las fuerzas
sindicales. Tal vez en el momento en que el Presidente Electo anuncie su
gabinete, observemos acercamientos. (Aclaro que al momento de escribir este
comentario no se ha anunciado oficialmente el nuevo gabinete).
GESTOS POLÍTICOS. Las primeras declaraciones que den los ministros designados
marcará mucho el estilo de gobierno que se puede esperar. De la misma forma, los
acuerdos que se den el 1 de mayo en la Asamblea, nos darán señales sobre el
acomodo de las fuerzas legislativas. El PLN dice que el PAC debe presidir el
Directorio. Restauración Nacional no piensa lo mismo. En torno a la designación del Directorio se pueden firmar acuerdos, que
podrían llegar a impactar el trámite de este proyecto. Y no descarto, a
juzgar por la movilización de esta semana,
acciones adicionales desde el frente sindical. Y ya se dio el
rompimiento del quorum por parte de
tres diputados opositores, aprovechando la ausencia de diputados del PAC y
Liberación Nacional en la Comisión.
CONCLUYO. Veo acuerdo en que la situación es delicada y debe arreglarse.
Observo tensión social en torno al reparto de las cargas. Hay presión por
aprobar lo que se tiene. Al mismo tiempo hay reserva por aprobar a “ojos
cerrados” lo que se recibe. Se debe
crear un espacio para el diálogo político y social, que permita acuerdos más
completos, con plazos definidos y el compromiso de votar lo que se pacte.
Forzar la salida de este proyecto puede quemar otros puentes necesarios para
buscar otros compromisos más amplios que le urgen a la Costa Rica del
Bicentenario.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario