NOTAS AL TEMA
URGE EL consenso HACENDARIO
Guillermo
E. Zúñiga Chaves
Ya tenemos los resultados del desempeño financiero del Gobierno
Central a mayo de este año. Esto nos da una buena idea de por dónde van las
cosas y, en cierta medida, marca una tendencia. Las cifras que utilizo las tomo
del WEB del Ministerio de Hacienda. Para
que el lector lo tenga presente, le recuerdo que la inflación acumulada entre
mayo del año pasado y mayo de este año, según el Banco Central, fue 1,67%.
LOS IMPUESTOS. Entre mayo del 2016 y mayo de 2017 la recaudación de impuestos
creció en 6,7%, cifra muy superior al crecimiento anual de la inflación y al
mismo crecimiento de la economía. Esto quiere decir que la Administración
Tributaria está haciendo un esfuerzo por mejorar la recaudación y está logrando
resultados favorables. Debe destacarse que el Impuesto a los Ingresos y Utilidades crece 11,4%. El Impuesto de Ventas
aumentó 4,5%. Esta es una nota positiva.
LOS GASTOS. Por su parte los gastos
totales crecen en el mismo período 11,8%, cifra muy superior al crecimiento de
los precios. Los gastos del Gobierno Central
están subiendo en términos reales. Y como son mayores a lo que crecieron los
impuestos, se aumenta el déficit fiscal y el endeudamiento. Esta es una nota
negativa.
Los gastos de capital fueron los que más crecieron (62,8%), y dentro de ellos, el mayor
aumento se da en las transferencias de capital que hace el Gobierno Central a
las instituciones (subieron 179%). Estas
cifras reflejan el esfuerzo que está haciendo el país por aumentar algunas
inversiones, como por ejemplo la mejora en caminos y carreteras.
Difícilmente siendo este el último año de la Administración, este rubro vaya a
bajar. En todo caso, si estos gastos se reflejan en mejoras para los ciudadanos,
en buena hora que se hace esa inversión.
Los gastos corrientes por su parte crecieron 9,2%. Es una cifra alta. El aumento en las
remuneraciones (que incluye los sueldos y cargas sociales) fue de 4,3%, cifra
mayor al incremento de los precios. Adicionalmente debe anotarse que el peso de estas remuneraciones es muy alto
dentro del total de los gastos; representa casi el 40% de los gastos
corrientes. De manera que ajustes que
se puedan hacer en ese rubro, tendrán grandes impactos en los resultados
generales. Lo cierto es que en el tanto
no se lleguen a acuerdos y no se tomen medidas, este seguirá siendo el comportamiento.
Debe recordarse que las remuneraciones en el Gobierno están asociadas
con el comportamiento de los precios. Por
eso, el dato a mayo refleja el último ajuste que se dio en medio de una
inflación baja. Con el leve repunte del crecimiento de los precios en en este
primer semestre, es muy posible que para el segundo semestre del año, las retribuciones
salariales harán más presión en los
gastos.
Gastos en intereses. Mención aparte merece el comportamiento
de los intereses. El crecimiento fue de
19,5% en el periodo. Y de estos los que más subieron fueron el pago de los intereses
por deuda interna (24,2%). El monto absoluto pagado en los primeros cinco meses
de este año fueron 377.352,6
millones de colones, lo que viene a representar como un sexto de los gastos
corrientes (cerca del 16% de los gastos corrientes). La
factura por el incremento de la deuda del Gobierno se está pagando; se deben desviar recursos que podrían ir a programas
de desarrollo nacional, para pagar intereses.
Lo grave de esto es que tanto el entorno nacional como el
internacional señalan que las tasas de interés van en aumento. Esta condición va a subir el pago por intereses en los
próximos meses y años. Ya entramos
en una etapa peligrosa pues estamos pagando los intereses con nueva deuda. Y, desde
luego, la amortización y los intereses de la deuda, siempre se deben atender.
CONCLUYO. Como se nota, la situación es muy delicada. Hay que bajar el
endeudamiento. No basta con recortar los gastos; o con mejorar la recaudación.
No alcanza. Hay que buscar el consenso para nuevos impuestos, el control del
gasto y el endeudamiento.