sábado, 23 de febrero de 2019

LA “INDEPENDENCIA” DEL BANCO CENTRAL Y EL DESEMPLEO. 23/2/2019

NOTAS AL TEMA

LA “INDEPENDENCIA” DEL BANCO CENTRAL Y EL DESEMPLEO

Guillermo E. Zúñiga Chaves

La ortodoxia económica ha celebrado, con bombos y platillos, la aprobación del proyecto 21.033, pues dicen que le da más “autonomía” al Banco Central para el manejo  de su política económica. 

La exposición de motivos intenta explicar la razón: “… la experiencia internacional ha mostrado claramente que en países con bancos centrales más autónomos se registran menores niveles de inflación. También, se ha demostrado que una mayor autonomía del banco central se asocia con mayores tasas de crecimiento del producto per cápita y una mayor contribución de la inversión en el producto interno bruto”. Como quien dice, con este proyecto se salvó el país.

SALE EL MINISTRO DE HACIENDA. Con la nueva ley el Ministro de Hacienda pierde el voto que hasta hoy ha tenido en la Junta Directiva.  Puede estar presente, pero no vota; es un convidado de piedra. Se argumenta, que se eliminan las “presiones políticas” sobre el Banco Central.  La exposición de motivos apunta: Para cumplir con su mandato, un banco central requiere autonomía para la toma de decisiones, con objetividad y fundamento en el mejor conocimiento técnico, y sin interferencia política o asociada con objetivos ajenos a su mandato”

PUROS. ¿De dónde han sacado que la presencia del Ministro de Hacienda en la Junta Directiva del BCCR es sinónimo de una “contaminación política” de las decisiones?  Es un voto en siete votos; o convence o pierde sus tesis.¿Cómo concluyen que un Ministro de Hacienda puede afectar el fundamento técnico de las decisiones? ¿Será acaso que el Ministro de Hacienda en su propio ámbito de trabajo, es decir cuando hace la Política Fiscal,  no utiliza “el mejor conocimiento técnico”? ¿Será que los otros miembros de la Junta sí son técnicos y además “apolíticos”? ¿Estos otros ni siquiera tienen preferencia por alguna teoría económica? 

Yo fui miembro de la Junta Directiva del BCCR mientras fui Ministro de Hacienda, y no creo que mi presencia haya comprometido la autonomía técnica del Banco. Por respeto  a sus funcionarios no puedo aceptar que siquiera se insinúe tal disparate. Lo que sí sé, es que como miembro de la Junta Directiva de BCCR estaba al tanto de la conducción detallada de la Política Cambiaria y Monetaria y cómo se podía armonizar con la Política Fiscal. Lo que también sé es que, siendo el Ministerio de Hacienda y el BCCR los mayores oferentes de títulos de deuda en el mercado de valores local, la coordinación de ambas instituciones  ayuda a no estrujarse  entre ellos y a hacer una gestión global del endeudamiento interno público.

OTRA COSA. Al presidente del Banco Central, aún con la ley modificada,  lo sigue nombrando el Consejo de Gobierno.  Y a los otros miembros de la Junta Directiva los propone el Consejo de Gobierno y deben ser ratificados nada menos que por la Asamblea Legislativa, el órgano más político del país. ¿Entonces?

EL FRÍO NO ESTÁ EN LAS COBIJAS. Los miembros de la Junta se rigen por el marco que les da la Ley Orgánica del BCCR. Y tendrán que cumplir con los objetivos que esa ley establece. Mientras el objetivo principal siga siendo el control de la inflación y el tema del empleo sea un objetivo subsidiario, la política del Banco seguirá estando centrada en mantener baja la inflación aunque el desempleo se dispare.El año pasado el desempleo  cerró, dolorosamente,  en 12% y no fue solo por la huelga, como dice el Gobierno. 

ESTE ENFOQUE TIENE QUE CAMBIAR CUANTO ANTES.Con la misma velocidad que los diputados aprobaron esta “nueva autonomía”, deben aprobar un cambio para que el empleo forme parte del objetivo principal del Banco. De esta forma, el diseño de su política económica deberá tener también como objetivo central la atención del empleo. Si se queda solo en estabilidad de precios, los resultados serán como hasta ahora. Es un asunto de enfoque; de visión del desarrollo, de sesgo ideológico. 

CONCLUYO. Con Ministro o sin Ministro, si no se cambian los objetivos del Banco, nada va a cambiar. Por los vientos conservadores que corren, pareciera que seguiremos con más de lo mismo. ¿Será para eso la “independencia”? Ahí se la dejo…








sábado, 9 de febrero de 2019

EL PROGRAMA MACROECONÓMICO 2019-2020. 9/2/2019

NOTAS AL TEMA

EL PROGRAMA MACROECONÓMICO 2019-2020

Guillermo E. Zúñiga Chaves

La lectura del Programa Macroeconómico (PM) que presentó el Banco Central la semana pasada, me deja un sinsabor. Están condicionando los resultados que presentan a una serie de supuestos (¿“buenos deseos”?) de difícil comprobación. El Banco se adelanta a decirnos que “Estas proyecciones macroeconómicas parten de la mejor información disponible a enero de 2019” (Pág. 9, PM), pero pongo dos ejemplos que invalidan esta afirmación. 

INCERTIDUMBRE. Parte afirmando que la incertidumbre que el sistema financiero ha tenido sobre el desempeño de nuestra gestión económica ha disminuido. Cito textual: “La aprobación y entrada en vigencia de la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas (Ley 9635) en diciembre pasado disminuyó esa incertidumbre”. (PM, Pág. 7).  No sé de dónde sacaron esta afirmación. 

El hecho real y cierto es que, pese a la aprobación de dicha ley, las calificadoras de riesgo Moody´s, Standard & Poor´s  y Fitch le bajaron la calificación de riesgo a nuestro país. Y nos pusieron en el rango de las B´s, “riesgo de incumplimiento alto”.  Y  lo que es peor,  con perspectiva negativa.

La perspectiva negativasignifica que cualquier acción futura que tomen a corto plazo sería para ajustarnos más a la baja.  Esto porque estiman que, a pesar de la reforma aprobada, el déficit  fiscal se mantendrá en rangos altos, con lo que la relación de la deuda del Gobierno Central al PIB seguirá creciendo, comprometiendo cada vez la capacidad de pago de nuestras obligaciones.  Y, ¡ojo!,  esta sí es información que estaba disponible en enero del 2019. 

EUROBONOS. Sobre esta premisa, le resulta fácil al Banco formular que la mejor salida para financiar el déficit fiscal es buscar financiamiento por  US$ 6.000 millones en el mercado internacional, la llamadaemisión de eurobonos.El argumento que se quiere vender es algo así: si disminuyó la incertidumbre, luego es un mejor negocio colocar bonos en el extranjero. Claro, están partiendo de una falacia. 

Pero lo que es más serio es que las proyecciones que el Banco presenta como su escenario base, las hace dando por un hecho que estos eurobonos se van a aprobar. Y desgraciadamente, hay que decirlo con toda claridad,  esta no es una información que  sea cierta (“esté disponible”) en enero del 2019. Sin la menor duda puede ser “un buen deseo”, pero el debate que se ha presentado en torno a este proyecto de ley en la Asamblea, no permite afirmar que ese proyecto se vaya aprobar tal y como lo solicitó el Gobierno.No hizo bien el Banco Central al formular sus proyecciones para el 2019 y el 2020, suponiendo que los eurobonos se van a emitir.Los inversionistas también leen el Programa Macroeconómico y saben que los números que ahí se presentan, incluyen una medida estratégica que no ha sido aprobada.Y también leen el clima político que se vive en torno a este y los otros proyectos. 

COSTO. Los reportes de las calificadoras de riesgo son usados por los inversionistas locales e internacionales para tomar sus decisiones de inversión. Desde luego podrán invertir en estos bonos de Costa Rica, pero le van a exigir al Gobierno que pague una tasa de acuerdo a los riesgos que esos bonos tienen. 

El mismo Gobierno conoce esto. Por ello es que en el proyecto de ley sobre los eurobonos  que envió a la Asamblea Legislativa, le está pidiendo a los diputados que le aprueben pagar una tasa de interés hasta 7,25% más alta que el rendimiento que pagan los bonos del Tesoro de USA para plazos similares.(Artículo 4, Proyecto de ley). A manera de ejemplo, bajo condiciones de esta semana,  esto daría una tasa máxima a pagar de casi 10% anual si, por ejemplo, el bono fuera a 10 años. Y recuérdese que esto es una emisión en dólares, que lleva además para el país el riesgo cambiario, en el tanto habrá que poner cada vez más colones por los dólares que se tengan que pagar para honrar la emisión. 

CONCLUYO.El Programa Macroeconómico parte de premisas cuestionables, para decir lo menos. Más parece haber sido formulado para apoyar el proyecto de los eurobonos. ¡Lamentable!